En una entrevista que brindó a Alejandro Fantino, el presidente electo Javier Milei anunció que las obras públicas licitadas en todo el país por cuenta del gobierno nacional se detendrán como parte del ajuste fiscal. La preocupación por la posibilidad que genere un proceso recesivo mayor.
También confirmó que pese a un ajuste de 15 puntos que realizará sobre las cuentas públicas, «la inflación va a seguir por 18 y 24 meses». Y calificó al ajuste fiscal de monumental. Sin especificar en qué ámbitos del Estado se realizaría ese ajuste.
La preocupación por las obras públicas es entendible, ya que más allá del beneficio directo que generan dinamizan las economías locales de las ciudades donde se realizan.
Fantino le trasladó una consulta de parte de un intendente al respecto y Milei fue categórico señalando «Nosotros no tenemos plata». En todo caso, explicó, que deberán ser los privados los que se hagan cargo de esas obras o los propios intendentes.
Las afirmaciones del flamante presidente recorrieron el país dejando estupefactos a los intendentes tanto del peronismo como de Juntos Por el Cambio por las probables consecuencias que esto generaría.
En su lugar, Milei propone un sistema de obras públicas de iniciativa privada «a la chilena».